Este blog va de libros y lecturas

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jueves, 10 de diciembre de 2009

Rojo y negro

Autor: Stendhal

Descripción: Madrid, Destino.- 2006,619 p.

Argumento: Rojo y negro (Título original Le rouge et le noir),es la historia de la ascención y posterior caída del protagonista, Julián Sorel, en la asfixiante atmósfera de la sociedad francesa anterior al 1830. Es una pieza clave en la novela europea del siglo pasado.



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PRÓXIMO ENCUENTRO:

Jueves, 14 de enero del 2010 a las 20:00
en la Biblioteca Municipal.
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11 comentarios:

Adela dijo...

Hola...¿cómo vais con la novela? Me quedan 80 páginas, y "ardo en deseo" de conocer el desenlace.
Hasta pronto.

luisi dijo...

Hola.
Que tal los reyes magos?
Habeis sido buenisimas...
A mí me quedan algunas más Adela, pero estoy como tu ,con los mismos deseos.
Un saludito.

luisi dijo...

Estais heladas...
buen día para leer rojo y negro, para preparar los buenos comentarios.
Quitaros un poco de esa mesa camilla.
saluditos
.

Teresa dijo...

¡No hay manera! ¡Qué frío!
A mi me quedan muchas páginas todavía, pero en realidad yo la estoy releyendo porque la lei hace muchos años. Lo que sí he leído es un comentario que hay al final de la edición que tengo yo que es muy interesante.
Seguiremos.

Daniela dijo...

Estoy en la tarea aún, pero después de los comentarios en la reunión mayor es el estimulo.
Por ahora decir que me parece lo suficientemente realista como para entender el que se haya desmarcado de su época.
La reunión muy interesante, me han gustado muchísimo las aportaciones. Creo que al haber leído Teresa, esta carta escrita por el propio autor, da muchas más luces y entendimiento a la obra.
Abrazos, nos estamos leyendo.

Teresa dijo...

Quería escribir algo de este libro, pero por ahora no me sale. Estos últimos días sólo me acuerdo del "ensayo sobre la ceguera". La lectura de ese libro tan reciente y los acontecimientos de Haiti, inevitablemente me hacen reflexionar sobre la condición humana. Hace poco tiempo una mujer estaba 30 días sin comer en protesta para que el rey de Marruecos la dejara volver a su casa. En Haití solo han pasado cinco días y la gente ya lincha y mata por un paquete de patatas fritas. La eterna cuestión porque en momentos tan dramáticos no somos capaces de construir, de ayudar. Como en el "ensayo sobre la ceguera" no hay respuesta. Un grupo hace lo posible para sobrevivir todos juntos ayudandose y otro echa su desesperación, su dolor, su odio sobre el que es igual de desgraciado que él. La naturaleza humana: angel y demonio.
Es desolador y muy triste.

Daniela dijo...

Sería interesante desde un punto de vista sociológico buscar respuestas a estas conductas. Tal vez la trayectoria histórica del pueblo, tal vez su inmenso sentimiento de desamparo arraigado durante décadas.
La tierra se remese y volvemos la cara hacia Haití para ser testigos de lo ocurrido, pero hemos sido testigos durante mucho tiempo y no nos remecíamos. Esto último también sería motivo de análisis ¿actuamos por empatía o por cargo de conciencia?
Pronto tendremos entre manos un libro que nos hará preguntarnos si es la sociedad la crea monstruos (como estos que roban, matan, violan etc.) o es el ser humano que nace con esa tendencia. Hemos escuchado muchas veces que los humanos tenemos la capacidad de rehacerse (los niños aún más), pero también debemos ser concientes, que todo parte por una opción personal. Quien prefiere robar a los muertos antes que enterrarles tomó su decisión y es cierto, Saramago nos lo relató magistralmente en su Ensayo sobre la ceguera.
Por eso cada día que pasa me siento más misántropa.
Abrazos.

Adela dijo...

Habeis visto la sonrisa y la mirada del niño que han rescatado hoy despues de cinco días bajo los escombros? Siempre hay un "ángel" por ahí perdido....entre tanta desdicha y tanta mala suerte.

Que triste y que desolador.

Daniela dijo...

Me queda nada de la novela. Vaya cacao mental que tenía Julián en la cabeza. Como si no fuese poco intentar escalar posiciones en un mundo que ve con mala cara tal acto, para enredarse en estos amores tan de perdida más que de encuentro.
Está muy bien escrita, sin duda...pero tanto romanticismo me agota.
Abrazos.

Daniela dijo...

Esta novela maravillosamente escrita, reconozco que me ha aplastado un poco. Así es que tengo que abstraerme del tema amoroso, para centrarme en otros detalles de la escritura. Si bien Stendhal se salió del molde dado por los románticos de su época y su obra figura como la precursora del realismo, son muchos los matices que la mantienen en el romanticismo.
Después de escuchar la carta escrita por el propio Stendhal, se entienden los motivos. En el arte como en casi todo en la vida, los periodos de transición son casi tan importantes como los que se acentúan. Salirse de los cánones establecidos para su tiempo, dar toques de realismo absolutamente innovadores para la época, romper con el estilo meloso y sobrecargado de los escritos de sus contemporáneos debió ser un reto muy difícil. Ahora releyendo el Werther y recordando toda la magia que pudo contener su primera lectura a los tempranos 15 años y viendo la diferencia que existe hoy con esta primera lectura de Rojo y negro, me doy cuenta de que siendo hoy algo más experimentada en el arte de leer, el tiempo mágico de Rojo y negro ya pasó. Afortunadamente queda la calidad, la historia, el estilo, la trayectoria de un autor.
Abrazos.

Teresa dijo...

Cada libro tiene su tiempo y cada tiempo sus libros. No obstante, quizás el problema radique en que al ser la lectura, en cierta manera impuesta, no vamos a todos los libros con la misma predisposición. Creo que ya lo he dicho en alguna ocasión. Uno nunca sabe por qué un libro te llama y siempre he estado convencida que son ellos quienes nos eligen. En este sentido es normal que no sintamos la misma emoción con todos los libros que leemos en el club, porque unos vienen porque sí y otros son un encuentro verdaderamente.
Nos vemos hoy.


Frase del mes

Alguna vez a lo largo de la vida, quizá ya de mayores, rebuscando en la despensa, un aroma regresa a nosotros y entonces reverdecen los recuerdos de aquel tiempo primitivo. La melodía que hace llorar a la anciana. El dolor que nos une. Quién ha perdido un hijo los ha perdido a todos.
Jesús Carrasco " La tierra que pisamos"