Autor: Goethe
Descripción: Madrid, destino.-2007,183 p.
Argumento: Es una novela, escrita en forma epistolar, que abrirá paso al romanticismo y encabezará el movimiento nacional del Sturm und Drang. Además, será la primera obra nacional conocida internacionalmente. El poderoso hálito romántico de la obra, su belleza formal y el acierto de la expresión escogida, lograron que calara hondamente en su época.
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PRÓXIMO ENCUENTRO:
Jueves, 28 de enero del 2010 a las 20:00
en la Biblioteca Municipal.
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PRÓXIMO ENCUENTRO:
Jueves, 28 de enero del 2010 a las 20:00
en la Biblioteca Municipal.
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17 comentarios:
De momento estoy leyendo el estudio inicial. Quería hacer eso, pero como me descuide me veo que sólo llevo el estudio. ¡jajaja!
Teresa, pero tú ya lo has leído. ¡Estás refrescando la memoria!
Sabes, ayer vagando por la red, me encontré en youtube algunas partes de la opera. ¡Es hermosa! La escuchaba y se me ponía la carne de gallina.
Dejo el enlace por si quieren escucharla, aunque está en francés. Este es del último acto. Una delicia.
http://www.youtube.com/watch?v=0sVVqWzmBa0
yo me quedaré en el estudio, pues me está costando salir de hay, pero ententaremos a ver.
¡jajaja! Mi me memoria ya no hay quien la refresque. Viendolo por el lado bueno, ahora todo puede volver a ser novedad. ¡jajaja!
¡El que no se consuela es porque no quiere!
Hola chicas:
Que acertado me está pareciendo que leamos a clásicos como el que tenemos entre manos en estos momentos. Es realmente agradable leer éste tipo de lecturas tan melódica y dulce en su léxico. Me gusta.
También me hace reflexionar sobre lo importante que sería hacer ciertas lecturas sin que fueran imposiciones colegiales. Cómo se podría hacer?
Un saludito
Pili
Hola chicas:
Que acertado me está pareciendo que leamos a clásicos como el que tenemos entre manos en estos momentos. Es realmente agradable leer éste tipo de lecturas tan melódica y dulce en su léxico. Me gusta.
También me hace reflexionar sobre lo importante que sería hacer ciertas lecturas sin que fueran imposiciones colegiales. Cómo se podría hacer?
Un saludito
Pili
Uffff Pili ¡vaya pregunta!
Yo lo dejaría en manos de los maestros de lengua o literatura (Aunque la familia también debería ser participe de esto). Se deberían hacer listados de imprescindibles ya sea clásicos, épicos, románticos, realistas, modernos, contemporáneos… Esas sugerencias y deberían ser guías básicas para asentar el placer por la lectura. Al menos deberían leer un par de autores por época, el que ellos eligiesen y trabajar sobre eso, pero es más cómodo dar un librito de 120 paginas escrito por no se sabe quien, ligerito para no agotarles y que sea fácilmente evaluable. Dos buenos libros al año, hacen más en la vida de un lector que cualquiera de los otros ofertados.
Los buenos maestros de literatura se arriesgan con los grandes autores y normalmente triunfan. Leer buenos textos desde la niñez crea el cimiento para un lector adulto, con capacidad critica y mirada pluralista.
Y aquí debo comentar algo más, queremos que nuestros hijos lean, pero pasada la infancia temprana dejamos de leerles como si la tarea hubiese concluido. Hay que seguir leyéndoles, aunque sea párrafos, hay que hacerles participes de nuestro gozo con la lectura (si lo tenemos, claro) y no como una imposición, si no como una invitación a descubrir maravillas.
El tema me apasiona ¿Se nota mucho verdad?
Siguiendo con el tema, Daniela, creo como tú que hay una época de la infancia en la que los padres nos volcamos y preocupamos más por ofrecerles libros y fomentarle la lectura. Pero creo oque la adolescencia es la época en la que los padres nos hacemos dueños de la frase, ellos ya son mayores ellos ya sabrán, y no seguimos fomentando. Es precisamente en esta fase cuando a nivel académico se le empieza a pedir más lecturas.
Quizás en algunos casos no sea cuestión más que de esperar a un buen libro y a un buen momento.
Hasta pronto.
Pili
Hoy precisamente lo hablábamos con Elena y Megan. Me decían que llegan a los clásicos hastiadas de ellos, porque el hecho de que se trabajen de forma obligatoria ya es un punto en contra. Sería mejor que fuesen alternativos, que fuesen lectura propuesta pero no impuesta y que en el colegio o en instituto se estimulara con libros que fuesen de calidad, pero con temas adecuados a los jóvenes y rápidos de leer (para no agotar).
Yo también creo que los libros llegan, pero creo que es bueno que lleguen en su momento, porque luego no se aprecian de la misma forma. Un buen ejemplo es el Werther, cuya lectura cambia absolutamente de la adolescencia a la edad adulta, pero y hablaremos más de eso en la reunión de mañana.
Abrazos.
La lectura del Werther en su día me toco vivamente la fibra sensible y no ya por la cuestión amorosa, sino por la cantidad de reflexiones que hay en él. Cada carta es una reflexión sobre muchas cosas y en la edad en la que te estás formando, aunque siempre nos estamos formando, pero cuando eres mayor hay cosas que ya las tienes asentadas. Como decía, en esa edad que tú también eres pasional en todo lo que haces y piensas, en que el yo está muy presente, el libro es un auténtico revulsivo porque pone a funcionar y a cuestionar muchas ideas. Por ejemplo: el suicidio, la idea de belleza, la naturaleza, el sentimiento patrio, la constancia en el amor, el trabajo, etc.
Aunque parezca que no, yo encuentro en nuestro tiempo también formas románticas, incluso en la política. ´
Seguiremos comentando.
Besos
A ver Teresa, por favor explica eso de formas románticas en la política!!
Sin duda es un libro de culto, pero no puedo dejar de enfadarme con Werther, de la misma manera que me enfadé con Julián Sorel. Es cierto que para que exista historia, tiene que existir un personaje, pero ¿tenían que ser tan masoquistas ambos?
Werther con su enamoramiento llevado a la sinrazón y Julián con sus vaivenes.
Como diría Isa, si nos acompañase en el blog “La ociosidad es la madre de todos los vicios”. Seguro el Werther de jornalero, trabajando de sol a sol no habría tenido tiempo para mirar los bellos y profundos ojos negros de Carlota.
Abrazos
Por ejemplo los nacionalismos.
Teresa, yo no veo los nacionalismos románticos, más bien los veo pasionales. Y de hecho el Werther es una novela romántica y pasional también, pues la pasión es un síntoma enfermizo de afición a algo o alguien, cosa que el Werther desarrolla en relación a Lotte.
El romanticismo es algo más suave, más sutil, algo impregnado de generosidad e inocencia, de calidez, ensoñación y sentimentalismo.
Los romances elevan, las pasiones abrasan.
Besos.
Me han llamado de la Casa de la Cultura, al parecer tendremos que retrasar 30 min. el cine forum por estar ocupada la sala hasta las 8:30 hrs.
Espero no sea problema, de todos modos lo publicaré en el blog y avisaré con días de antelación.
Abrazos.
el romanticismo como movimiento y como lo plantea Wether es así, otra cosa es lo que hemos dado en llamar romanticismo después.
Amigas, estoy por estos días con poco tiempo para escribir, además sin Internet en casa, así es que hasta que solucione el problema me verán poco por aquí.
Estoy de acuerdo con Teresa, en que este romanticismo nuestro nada tiene que ver con el del Werther.
¿Qué habría hecho el Werther con un día de los enamorados?
Hola, ¿Que tal? solo saludaros.
¿Llevais bien la lectura?.
le he hechado un ojo a alguna escena de la peli,
DEL SEÑOR DE LAS MOSCAS.
Saludos para todas.
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