Este blog va de libros y lecturas

Este blog va de libros y lecturas

domingo, 5 de mayo de 2013

Resurrección




Cuando el príncipe Nejliúdov acude al tribunal para ejercer su deber ciudadano como jurado, no se imagina que una de las acusadas es Katia Máslova, la antigua criada de sus tías, la joven a la que sedujo años atrás. Ahora, convencido de su inocencia, se siente culpable de la difícil situación en la que se encuentra Katia y de la posibilidad de que sea condenada a trabajos forzados en Siberia.

Con Resurrección, la última de sus tres grandes novelas, Lev Tolstoi aborda el complejo proceso de cambios a los que tubo que enfrentarse la sociedad rusa en los convulsos años finales del siglo XIX.
A partir de los esfuerzos del príncipe Nejliúdov por redimir a Katia del estigma que le provocó en su juventud, Tolstoi refleja su propia indignación ante las injusticias sociales de un país en decadencia y de una aristocracia anacrónica y autocomplaciente. Un relato íntimo de culpa, rabia y arrepentimiento dominado pro la redención y la condena de la violencia.

2 comentarios:

Daniela dijo...

Ya en el II capitulo de la primera parte, en donde empezamos a conocer la historia de Katia Maslova, parece que Tolstoi ha escrito la historia.
Es apenas el segundo capitulo del libro y hay una historia que desgarra, entristece y deja poco que esperar del devenir de la protagonista.
La vida de Katia que podría ser la vida de millones de mujeres (No por repetida, menos desgarradora), gracias a la genialidad de las letras de este escritor se transforma en el puente que nos conducirá a todo un entramado moral, social, religioso y político.
surgen grandes preguntas que cuestionan sin querer los ojos del lector.
¿Katia, pudo haber cambiado su destino? ¿Debía el príncipe sentirse culpable del destino de ella?
¿Hasta qué punto la responsabilidad sobre nuestros actos, nos hace responsables también de los actos de otros?
Una novela simplemente magistral.
Abrazos blogueras.



Teresa dijo...

Cuando nuestros actos cambian el rumbo de la vida de otros, somos completamente responsables. La maldad o la injusticia que cometemos contra otros les obliga a tomar decisiones o incluso ni eso porque no pueden salir (como es caso de Katia) de ese mundo en el se la ha condenado a vivir. No hay libre alberdrio? si, pero en la sociedad en la que le tocó vivir y sufrir la acción del príncipe condiciona las posibilidades de Katia, por ello él es responsable también de todo lo que le sucede, responsable moral, claro está. Aunque las decisiones de Katia respecto a su vida le competen a ella solamente, no son decisiones libres son situaciones de desesperación que la empujan por un camino porque el que ella se resiste a ir, pero la sociedad de su tiempo no le deja otra puerta. Eso también es importante, el tiempo en el que se desarrolla la historia. Hoy no tiene nada que ver y una mujer sea empleada de hogar o directora de un banco no ve tan condicionada su vida por tener un tipo de relación, al menos no como en el contexto que le toca a Katia que sí es determinante. De ahí que la responsabilidad moral del príncipe sea mayor.


Frase del mes

Alguna vez a lo largo de la vida, quizá ya de mayores, rebuscando en la despensa, un aroma regresa a nosotros y entonces reverdecen los recuerdos de aquel tiempo primitivo. La melodía que hace llorar a la anciana. El dolor que nos une. Quién ha perdido un hijo los ha perdido a todos.
Jesús Carrasco " La tierra que pisamos"